Las excavadoras han saneado los socavones de la avenida del Recinto Ferial y peligra hasta la escalera de entrada hueca por debajo...

Más agujero que ayer, pero menos que mañana... y los niños por encima

Hemos visitado los socavones de la avenida principal del recinto Ferial y hemos constatado que las escavadoras están agrandando los mismos, eliminando los rellenos blandos de arena que han originado los hundimientos y buscando terreno fuerte para comenzar a rellenar. Ayer escuchábamos a los mayores que visitaban las obras que nos decían que la escalera estaba en el aire, hueca por debajo, porque habían sentido cómo vibraba cuando la máquina se hundía en el agujero cerca de ella. Hoy hemos visto cómo el túnel hecho por la excavadora se introducía debajo de la escalera dejándola colgando. Habrá que tirarla con toda seguridad. Eso sí, no habían cortado el tráfico de la calle y sobre el agujero, ver foto, pasaban los niños al salir de la escuela tranquilamente.
Mucho se ha especulado sobre la valoración de los daños, 600.000 euros, que dió la oficina de Prensa del ayuntamiento a las pocas horas de producirse el siniestro, y sin que las máquinas hubieran despejado los socavones. ¿De dónde salió tal valoración?. Hay quien piensa que debería levantarse todo el paseo, puesto que no es la primera vez, ni será la última, que se produce un socavón en el mismo. El relleno mal consolidado cuando se embovedó el arroyo que circula por debajo de la avenida puede ser el causante de estos destrozos. El agua busca su cauce y si se los tapas, acaba abriéndolo. Cien millones de pesetas son muchas pesetas para que nadie explique por qué una paseo se hunde debajo de nuestros pies. Un paseo que debería haber sido supervisado por los técnicos municipales para evitar este tipo de catástrofes. Catástrofes derivadas, seguramente, de haberse ahorrado el constructor del mismo unos pocos euros en la consolidación del terreno y en la colocación poco cuidada de las tuberías que pasan por debajo.
Mañana más.